Correteando por las calles de Carabanchel desde el 93. Cogí por primera vez una cámara a los 9 años e influenciado por lo que me rodeaba en casa empecé a cacharrear con ella y así hasta ahora. Dando color con las diapositivas del Mompradé que estaba antes que yo y movimiento con aquella primera cámara que cogí me gusta dar vida a muros grises, espacios vacíos que por minutos, horas, días se convierten en lugares de liberación colectiva integrando a esos cuerpos danzantes en esos mismos muros que durante ese tiempo pertenecen a todas.